[Naruto]Vínculos de venganza +18[Violación,sumisa]Capítulo 7+Epilogo final

Recordatorio: Este fanfic está escrito por UzumakiNa y Princessa Saiyan (yo). El anterior capítulo Capítulo 6 Odio fue escrito por mi compañero. Este capítulo final,  7 "Confesiones" y epílogo "Vínculos de venganza" está escrito por mi, Os dejo con ello.

Capítulo 7

Confesiones

-Naruto-Kun... - Susurro mientras siento mi cuerpo pesado y dolorido. - Mi bebé...
-Hinata, Hinata reacciona. - Veo a Naruto cogerme en brazos mientras de su cara sale sangre a borbotones. - Has caido en un genjutsu. Has estado incosciente mucho tiempo.
-¿Sasuke-Kun? - Pienso en él. - ¿Dónde está Sasuke Kun?
-No pienses en eso ahora, Hinata. Vamos a la villa, necesitas un médico para ti y tu hijo. - ¡Mi hijo! Pienso rapidamente otra vez.
-Mi bebé, Sasuke-Kun mató a mi bebé. - Empiezo a llorar sin consuelo mientras pongo mis manos sobre mi tripa, intentando encontrar mi herida hecha por Sasuke. - ¿Dón...Dónde está?
-Hinata, estás bien, sólo has estado incosciente. - Me mira sonriendo. - Caíste en un genjutsu, todo lo que viste sobre tu barriga era una ilusión. Tu bebé sigue ahí, contigo.

Siento una alivio en mi cuerpo y una tranquilidad que me invade por dentro ¿Por qué? ¿Es lo mejor tener este niño? ¿Y Sasuke? Si no me hizo eso realmente, no puede ser tan malo, ¿no? Un extraño sentimiento se crea en mi corazón. No puedo, no debo y no es bueno pensar en Sasuke ahora, pero no puedo evitarlo.

-Naruto-Kun... - Digo despacio. - ¿Dónde está Sasuke?

Los ojos de Naruto se clavan en los mios y puedo percibir algo extraño en ellos ¿Decepción?, quizás sólo es tristeza. Soy consciente de que han tenido que pelear, sólo hay que ver a Naruto para darse cuenta de eso.

-¿Naruto? - Pregunto mientras siento que se aleja de la realidad. - ¿Y Sasuke?
-Ha muerto. - Dice finalmente. - He ganado.
-¿Qué? - Pregunto incrédula. - No lo dices enserio, ¿Verdad?
-Él lo deseaba, Hinata. - Contesta sin mirarme a los ojos. - Es mejor así.
-Naruto...¿Cómo has podido? - No puedo creer lo que me está diciendo. - Es tu mejor amigo, un hermano para ti, ¿Cómo demonios has podido hacer eso?
-¿Por qué te afecta tanto, Hinata? - Me mira con ¿odio? - ¿Acaso disfrutabas demasiado con él mientras decías que me amabas?
-¿Cómo dices? - No puedo creer lo que estoy oyendo, y mucho menos que sea por boca de Naruto. - Tu promesa siempre fue traer a Sasuke de vuelta a Konoha y nunca hacerle daño. ¿Cómo has podido hacer eso?
-Entonces es cierto... - Susurró. - Disfrutabas con él y por eso no me contaste que lo veías.
-¿Eso crees de mi, Naruto-Kun? - me encuentro exahusta, completamente anonanada. - Es el padre de mi hijo.
-¿Por qué eres tan mentirosa Hinata? ¿Por qué vas diciendo por ahí que estás enamorada de mi? ¿Para acostarte con Sasuke mientras tanto? ¿Para quedarte embarazada de mi mejor amigo al que he tenido que matar?



No puedo evitarlo y mis lágrimas caen sin control. Siento un sentimiento profundo y desconocido hacía Naruto. Yo he vivido los peores momentos de mi vida por ayudarle, por traer a su amigo, por evitar que no pelearan hasta la muerte y ¿qué he conseguido a cambio? Ser violada, quedar embarazada, conseguir que se peleen hasta la muerte y perder a Sasuke para siempre. Encima no lo entiende, ¿Cómo puede ser tan cabeza hueca?

-Eres idiota, Naruto.- Grito mientras lloro y le empujo, apartándole de mi. - ¿Cómo has podido? Confiaba en ti, maldita sea, prometiste que lo llevarías a Konoha. ¡¡Lo prometiste!!
-¿Cúanto tiempo llevabas con él? - Me agarra del brazo. - ¿Por qué me has mentido así Hinata? ¿Por qué tú? Maldita sea, tú. La última persona de la que esperaba algo así.
-No me hables de mentiras cuando tú has roto tu promesa. -Grito desesperada. No entiendo este dolor que siento en mi corazón por Sasuke, ni el sentimiento tan extraño hacía Naruto. - Has matado a tu mejor amigo, Naruto-kun, al padre de mi hijo.

Me puse la mano en mi vientre mientras me soltaba del agarre de mi compañero y caía de rodillas al suelo.

-Él no era tan malo, él no... - Le miré a los ojos. - podía haberme matado, a mi y al bebé y sin embargo no lo hizo. Sólo me dejó incosciente para pelear contigo.
-¿Y si no te hubiera seguido? - Me preguntó, dejándome una duda en la que no había pensado. - ¿Sólo te hubiera metido en un genjutsu? ¿Os habría matado a ambos?
-¿Por qué me seguiste? Maldita sea. - Lloraba moviendo mi cara de un lado a otro. - Él sabía que estabas ahí. ¿Cómo no me di cuenta antes de tu presencia? ¿Por qué me seguiste, Naruto?

La impotencia y culpabilidad de creer que yo tenía la culpa de lo que había sucedido con Sasuke me estaba deborando por dentro. No podía pensar ni reaccionar, sólo llorar y dedicar palabras que nunca imaginé a Naruto. Él sólo me miraba con desprecio ¿Por qué? ¿Qué demonios piensa?

-¿Desde cuando lleváis viendoos en secreto? - Preguntó apretando los puños. - ¡¡¡Dímelo!!!
-No es lo que crees, Naruto -Kun. - No podía creerlo. - Y si lo fuera, ¿Qué te importa con quién yo esté? Sólo tienes ojos para Sakura, ¿O crees que no me doy cuenta?
-Eres mi amiga Hinata, me preocupo por ti. - Comenzó a alzar la voz aún más.- Yo siempre he ido detrás de Sasuke, sabías mi promesa a Sakura y aún así, te lo has callado que lo veías.
-Maldito seas, Naruto-Kun. - Grité mientras le daba una bofetada.- Eres un imbécil.
-¿Cúanto tiempo llevabas siendo su novia? - ¿Novia? ¿De verdad ha dicho novia? - Te has quedado embarazada de él, Hinata, ¿Cuántas veces os habéis acostado?
-¿Su...su novia, dices? . -Pregunté atónita . - ¿Crees que soy capaz de algo así?
-El mismo Sasuke me lo contó. - Dijo cegado mientras veía en su cara algo que no había visto nunca en Naruto. - No podía creerle hasta que te escuché hablar ati de él.

Me di la vuelta, no tenía fuerzas para afrontar a la cara de Naruto lo que tenía que decirle. Y mucho menos después de que me haya dicho esas palabras. Nunca imaginé que alguien como él, al que he admirado tanto, por el que he puesto en juego mi vida y al que he amado pudiera tratarme de esta manera tan baja, ruín y miserable. Nunca he dado motivos para desconfie de mi ni para que me considere ese tipo de persona. Siento...desprecio, dolor, rabía, humillación...

-Naruto-Kun... - Quise llamarlo como siempre había hecho, después de todo no quería cruzar mas palabras con él por ahora. - Sasuke Uchiha...me violó.
-¿Qué? - Preguntó sin terminar de creerme. - Tengo entendido que no has venido sólo una vez. Si te violó ¿Por qué volviste?
-La primera vez que vine a buscarlo para ayudarte a llevarlo a Konoha me ató y me violó, me mordió dejándome marcas que después tu vistes. - Le miré a los ojos para que viera mi dolor y mi rabia. -  ¿Lo recuerdas Naruto-kun? Me preguntaste que eran y te dije que era un golpe.

Observo atenta los ojos de Naruto que se tornan rojizos, su cara cambia, su cara se ensombrece y puedo sentir su rabia corriendo dentro de él.

-Volví a verle después de aquello. - Sonreí con tristeza. -Olvidé algo en su guarida muy importante para mi.
-¿Importante? - Pregunta sin poder creerlo. - Te violó y te hizo todo aquello ¿y dices qué había algo mas importante que tu vida?
-No podía dejar atrás la cinta que me heredó mi abuela. Es lo único que me queda de ella, Naruto-Kun. - Agarré la bandana en mis manos y mientras la miraba continué con los hechos. - Me metió en un genjutsu y me torturó sexualmente.
-¿Y por qué has vuelto hoy? - No se si lo que sentía era contra mi o contra Sasuke.
-Hace dos meses descubrí que estaba embarazada de Sasuke, pues nunca he estado con otro hombre. - Me puse la mano en mi vientre, agarrándolo con instinto de protegerle. - Tenía la estúpida idea de que si Sasuke sabía que esperaba un hijo de él volvería a la aldea y tú serías feliz, y cumplirías tu promesa a Sakura.
-Hinata... - Susurró acercándose ami despacio, mientras podía sentir la ira que le corría por el cuerpo. - Yo... yo... lo siento.
-No me toques, Naruto-Kun. - Supliqué poniendo mis manos delante de mi para frenarle. - Por favor, no.
-Pero Hinata...
-No puedo odiarte, jamás podría hacerlo. Pero... - Tragué el nudo en mi garganta que me impedía hablar. - no puedo fingir que no me duele tu trato.
-Perdóname Hinata, por favor, soy un idiota, debería haberme dado cuenta. - Me suplicaba nervioso que olvidara su error.  - Lo siento.
-Has matado a Sasuke, el padre de mi hijo. - Continué. - No puedo hacer como que estoy bien. Yo...
¿Me vas a decir qué le querías? ¿Con todo lo que ha hecho?
¿Acaso no le quieres tú, Naruto? ¿Le odias? A pesar de haberle matado, ¿Puedes realmente odiar a Sasuke Uchiha, que era como tu hermano?

Veo que agacha la cabeza, aprieta los puños y no me dice nada. Efectivamente no puede odiarle, ni alegrarse de su muerte. Yo tampoco puedo. Quizás tengo el síndrome de estocolmo, no lo sé. Pero no puedo odiar al padre del niño que llevo dentro de mi ser y que está creciendo en mi vientre. Seré una idiota pero no puedo odiarle. La tristeza me inunda y no se si es por mi pelea con Naruto o por la muerte de Sasuke, pero no puedo sentir nada malo hacía este último, no ahora que está muerto. Se me pasa por la cabeza la idea de que me podía haber matado a mi y al bebé y no lo hizo. Si lo hubiera intentado quizás, sólo quizás, hubiera podido tener un mal sentimiento y rencor hacia él.

-Hinata, perdóname.- Suplicó Naruto una vez mas agarrando mi mano. - Me volví loco de rabia.
-Lo sé. - Sonreí con tristeza. - Pero no quiero verte ahora mismo Naruto-Kun, quiero estar sola un tiempo y superar todo lo que me ha pasado en estos meses.


Solté su mano y con la debilidad que sentía en mi cuerpo, y la mano en mi barriga, seguí mi camino hasta casa. Me iba a costar superar todo esto, estoy segura, pero lo conseguiría. Tenía fe en ello.

Epílogo

Vínculos de venganza

Apenas siento mi cuerpo, mi brazo izquierdo no...no lo noto, es como si no estuviera. Me encuentro muy muy débil. ¿Estoy muerto? No puedo morir, aún debo vengarme de Konoha, de todos ellos. Y de Naruto. ¿He ganado a Naruto?

-Sasuke...muérdeme. - Escucho una voz familiar. - Vamos Sasuke, muerde, no te queda tiempo.
-¿Ka...Karin? - Me coge la cabeza, apenas puedo sostenerme por mi mismo. - ¿Qué...?

Se me cierran los ojos, me cuesta respirar, mi cuerpo cada vez está más y más pesado. No puedo mover nada.

-Maldita sea Sasuke, muerde. - Me repite una y otra vez, pero no tengo fuerzas. - Abre la boca.

Hago lo que me dice, como puedo y con todo el esfuerzo que me queda. Empiezo a notar mi cuerpo nuevamente. Mi brazo... no lo siento. No puede ser... no puedo creer, me niego a pensar si quiera en eso. Empiezo a abrir los ojos y ser mas consciente de la realidad y todo lo que me rodea. Karin, Suigetsu, Juugo. Todos están ahí observándome. Al fin vuelvo a ser yo y recuperar parte de mis fuerzas.

-Sasuke, tu brazo...- Karin me avisa e instintivamente miro a la izquierda. - Has perdido el brazo.

Maldita sea. He perdido mi brazo izquierdo contra Naruto. ¿Cómo he podido perder así?. Veo detrás de Suigetsu una figura conocida.

-¿Qué demonios haces tu aquí? - Le pregunto intentando incorporarme.
-Mira como te ves, Sasuke. - Se pone a mi lado y me pone la mano en mi hombro. - Esto puede ser una molestia para nuestros planes.
-¿Nuestros? - Le sonrio con maldad. - No recuerdo haber aceptado tus ordenes.
-Tanto tu como yo queremos destruir a Konoha. - Me insistió. - ¿Olvidas lo que le hicieron a Itachi?
-Se perfectamente lo que le hicieron a mi hermano. - Le dediqué una mirada de odio. - Es por eso que tengo mis propios planes para esta venganza.
-No es el momento de atacar Sasuke. Tenemos que jugar bien nuestras cartas. Y aprovecharnos de tu supuesta muerte.
-¿Qué? - ¿Me había dado por muerto Naruto? - ¿Piensan que estoy muerto?
-El Uzumaki no se ha molestado ni en verificar tu estado, ha dado por hecho que habías caído en combate. - Lo veo alejarse hasta Karin. - Los dos debéis descansar. Tengo algo que te puede gustar, Sasuke.

Trae a Karin hasta ami y hace un sonido que identifico como una sonrisa. Con esa maldita máscara no puedo ver su cara y es mas difícil de predecir que los demás. Salimos de allí y regresamos a nuestra zona. Me alejo de ellos y me quedo solo mirando al horizonte.
Pienso en todo lo que ha pasado en tan poco tiempo y vuelve a mi cabeza todo con cuentagotas. Itachi, Hinata, Naruto, Konoha, Danzo... mi venganza para todos ellos. Una idea macabra me ilumina la mente...Hinata embarazada de mi. Mi sueño de reestablecer mi clan podría cumplirse...pero antes debo cumplir mi venganza por lo que le hicieron a mi hermano.

Escucho pasos tras de mi y veo que Tobi se pone a mi lado.

-Y bien Sasuke, ¿Has pensado lo que te dije?
-La Hyuga está embarazada.
-Lo sé.
-De mi. - Digo siseando.
-¿Es un problema para la destrucción de Konoha? - Pregunta y en su tono noto cierta preocupación.
-La destrucción total de Konoha es un hecho. - Aprieto los puños con rabia. - Pero aún existen vínculos con la aldea.
-¿Quieres a ese crío?
-He dicho que existen vínculos, no que quiera un hijo con ninguna desgraciada de Konoha.
-¿Entonces? - Me puso la mano en el hombro. - ¿Ese vínculo es tu hijo?
-No. - Le miro al ojo que asoma por esa horrible y perturbadora máscara. - Los vínculos de la venganza.
-Esa era nuestra prioridad Sasuke. - Me dice tranquilo al escuchar mi decisión.
-No lo entiendes. - Me cabrea que no pille mis indirectas. - Antes de la destrucción de la aldea, tengo otra venganza que hacer.
-¿El Uzumaki? - Al fin comprendía lo que quería decir.
-Me han dado por muerto y eso puede jugar a mi favor con...-necesito un momento para procesar estas palabras. - mi hijo.
-¿En que estás pensando, Sasuke?
-Pronto lo sabrás. - Sonreí. - Lo que te puedo asegurar es que sufrirán y después destruiré Konoha.
-¿Y ese niño? ¿No es un vínculo muy fuerte para ti?
-No. - Abrí los ojos y le miré. - son mas fuertes los vínculos de la venganza.



Fin.