[Naruto] Vinculos de venganza [+18 violación, sumisión] [SasuHina]Capítulo 1

N.F: Este es un fanfic conjunto hecho por UzumakiNA24 & Princessa Saiyan, cada uno de los capítulos seran escritos de forma intercalada.

Vínculos de venganza

Por Princessa Saiyan

Capítulo 1

Amiga

Hace tanto tiempo que le conozco que mi corazón le pertenece a él. No puedo dejar de pensar en sus ojos azules, su pelo rubio y su carita de gatito travieso. Naruto-kun, llevo enamorada de ti demasiado tiempo y no soporto la idea de perderte. Te veo detrás de Sasuke, sufriendo por él por una estúpida promesa que le hiciste a Sakura chan. Me aterra la idea de que te pierdas en ese pozo oscuro en el que se metió Sasuke. No se que hacer para ayudarte, mi corazón se rompe de pensar en el dolor que te ves sometido cada día, esperando una vuelta que nunca llegará.

Pero nunca te rindes, siempre avanzas y superas cualquier obstáculo que hay en tu camino. Este camino está lleno de piedras y es imposible que consigas avanzar. No puedo quedarme de brazos cruzados esperando que llegue la solución, te ayudaré. Encontraremos juntos el camino de vuelta y podremos seguir nuestras vidas y tú conseguirás tu sueño de ser Hokage.

Debo darme prisa antes de que se den cuenta que falto, debo encontrar a Sasuke y llevarlo a la aldea. No quiero que pierda el brillo en sus ojos por culpa de ese Uchiha con el que está obsesionado.

No dejo de correr en busca de la última ubicación que hay fiable de Sasuke, es la única manera que se me pasa por la cabeza para poder hacer algo útil.

A lo lejos noto cierto movimiento y explosiones, voy corriendo y observo que Sasuke está peleando con un Akatsuki y que la pelea a llegado a su fin. Mal herido desaparece, sin percatarse de mi presencia. Soy cuidadosa y mantengo la distancia con mi Byakugan activado para no perder detalle de todo lo que sucede. Conforme el Uchiha avanza, avanzo yo con él, sin dejar de esconderme para saber donde se dirige y poder hablar con él. Entrando en una guarida oscura y siniestra que me produce escalofríos lo veo perderse.

Voy hasta allí y con suma cautela entro despacio hasta dar con él. Conforme entro las puertas de detrás de mi se cierran dándome un susto de muerte que me hace sobresaltarme.

-¿Qué haces tú aquí? - Sólo su voz tan fría ya me estremece todo el cuerpo y no se como reaccionar frente a él. - Hyuga Hinata.

-Sasuke-Kun. - Sin saber muy bien como hablarle sólo digo su nombre.
-Te he hecho una pregunta, Hinata. - Dice muy serio poniendo su mano en su barriga. - ¿Está Naruto contigo?
-No, he venido sola. - Respondí decidida.
-Tienes que ser muy estúpida para aparecer aquí sola.
-Debes volver.

Me mira inexpresivo y lanza una carcajada que me hiela la sangre.

-¿Naruto te manda por mi? ¿Es una broma?
-No es cosa de Naruto, es cosa mia Sasuke-Kun. - Grité ofendida.
-Lárgate de aquí niñata, no tengo tiempo para tonterias.

Dispuesta a hacerle entrar en razón cogí su mano, fría y manchada de sangre.

-Sasuke-kun, tienes que volver, Naruto te necesita.
-Sólo quiero estar cara a cara con Naruto para demostrar mi potencial frente a él. - Dijo mirándome con rabia a los ojos. - Y ese día perderá.
-Él nunca peleará contigo, eres un hermano para él.
-El único hermano que tengo morirá pronto. - Sonrió con malicia soltando mi mano. - Debo matar a mi mejor amigo, niña, aunque eso implique que sea Naruto.
-El no peleará contigo por tu capricho Sasuke – Kun.

Me agarró por los pelos haciendo que soltara un grito y me agarrase a sus manos sin pensar.

-¡Sasuke!
-Se me ocurre una manera de atraer a Naruto hasta mi.
-¡Suéltame, por favor!

Me encuentro asustada sin saber como reaccionar, siempre se ha hablado de los sentimientos de los Uchiha y Sasuke no es una demostración de estabilidad. Me preocupa saber que idea se le pasa por la cabeza para atraer a Naruto hasta este agujero oscuro.

Me empuja contra la pared y tapa mi boca con su mano. Veo una mueca de dolor en su cara y recuerdo haber visto sangre. Me agarra del cuello y noto que mis pies abandonan del suelo.

-Sasuke... -apenas puedo hablar. - Por favor...suéltame.
-El niñato seguro que sigue enamorado de Sakura, pero -Me abrió la chaqueta dejándome expuesta y avergonzada. - se lo importante que son sus compañeros para él.
-No, por favor Sasuke kun – Suplicaba para evitar lo que yo creía que iba a hacerme. - Puedo ayudarte.
-¿Ayudarme? - Aprieta su cuerpo contra el mio. - ¿Qué te hace pensar que necesito ayuda, niñata?
-Estás herido. - Dije despacio . - Puedo curarte.
-No necesito tu ayuda, la única que necesitará ayuda aquí eres tú y espero que sea de Naruto.

No me dejó hablar más, me quitó las prendas que cubrían mis pechos y puso su cara a la altura de ellos. Acercó su boca a los pezones y los mordió haciéndome daño y dejando marcas de sus dientes. No me podía mover, no se si era por que su cuerpo me lo impedía o por la vergüenza que sentía de encontrarme así frente a él.

Metió su mano en mis bragas, invadiendo mi intimidad y abriéndose paso con los dedos en mi interior.

-Voy a dejarte tantas marcas que hasta el estúpido de Naruto se dará cuenta que has sido mía.

Sin darme cuenta los dientes de Sasuke se estaban clavando en mi cuello, haciéndome gritar y sintiendo la sangre caliente que bajaba por mi piel.

Sus movimientos violentos con los dedos en mi vagina me estaba destrozando y sólo podía llorar pidiendo que parara. La impotencia, el miedo y la incredulidad que estaba viviendo con mi antiguo compañero me iba a marcar de por vida.

En mi muslo podía notar la erección del Uchiha dura, intentando salir de la tela que lo aprisionaba. Metió su rodilla en medio de mis piernas obligándome a abrirlas y se colocó por completo entre ellas

Separó su torso de mis pechos aplastados, se quitó la cuerda que agarraba su espada, la pasó por mis manos y me ató para impedir que me moviera.

Completamente indefensa, me arrancó los pantalones dejándome desnuda a su merced. Podía notar mis mejillas arder y el pánico apoderarse de mi de saber lo que iba hacer conmigo. ¿Por qué? ¿Tanto a cambiado Sasuke? ¿Tanto odio guarda en su corazón? ¿Como puede hacer esto para dañar a Naruto? ¿Cómo puede hacer daño a las personas sin mirar las consecuencias? A nosotros, que somos sus antiguos compañeros. No sabia como sentirme y frustrada por la situación, aturdida por la vergüenza y dolida por sus movimientos no podía dejar de llorar.

Era una marioneta a su merced, los hilos de su rabia me ultrajaban sin poder defenderme. "Naruto" pensé en él y las lágrimas tomaron mas fuerza. Esto le dolería mucho, saber que por él he pasado un tormento, por eso debo callar y procurar que no se entere de nada, no debo dejar que se peleen nunca o Sasuke podría matarle.

Notaba la lengua del Uchiha lamer mis pezones, sus dientes entraban en mi carne y se habrían paso dejando un rastro de sangre y dolor. Cada caricia suya era una marca violenta en mi piel para enviar un mensaje a Naruto.

Cuando se apartó y creí que todo acabaría se quitó la ropa, quedando completamente desnudo y excitado frente ami.

Posicionándose entre mis piernas abiertas a la fuerza, colocó su erección en mi sexo y empezó a frotarse con el. La vergüenza me estaba destrozando y la sensación de ser ultrajada no tenía igual. Con su mano puso la punta de su miembro en la entrada de mi vagina y empujó abriendo mi carne para él. La invasión en mi interior, dura y enorme me estaba desgarrando. Mi lubricación inexistente hacía mas dolorosa la penetración y a juzgar por el dolor y el líquido caliente que notaba en cada embestida diría que me estaba desgarrando.

Sólo lloraba y gritaba que parase entre súplicas, pero Sasuke simplemente se limitaba a reír y a seguir embistiéndome. Buscando su propio placer se movía una y otra vez dentro de mi, cada movimiento me hacía mas daño y podía notar como poco a poco podía entrar mejor en mi interior. Me dio la vuelta y me puso con la cara pegada a la pared me agarró del pelo, y con su otra mano me agarró de la cadera. En esta postura, en la que era un triste juguete me clavó las uñas en mi piel y me volvió a penetrar de una manera salvaje.

-No se por que me sorprende que seas virgen. - Susurró en mi oído. - Siempre has sido la mojigata.

Podía notar su miembro duro atravesarme una y otra vez, se me clavaba en la cintura en cada embestida y llegó un momento donde el dolor cesó, sólo la vergüenza y la tristeza jugaban conmigo. No llegaba a comprender en que momento había entrado en esta situación, como yo he podido caer tan bajo en algo tan horrible como esto, cómo Sasuke ha podido hacerme eso por dañar a Naruto.

Sentí el último empujón dentro de mi y algo cálido invadirme. La respiración de Sasuke la sentía en mi cuello, donde se dejó caer y volvió a clavarme los dientes dejando su marca.

-Quiero que cada vez que te muevas sientas que yo he estado dentro de ti y recuerdes que puedo hacerlo cuando quiera. - Salió de mi interior. - Dile a Naruto que le estoy esperando.

Me cortó las cuerdas y me dejó en el suelo tirada, él desapareció en la oscuridad de la habitación y me encontraba sola, desnuda y violada.

Me pongo en pie sintiendo un dolor punzante en mi intimidad, paso mi mano, marcada por las cuerdas, y al acariciarme me noto mojada. Observo mis dedos y veo la sangre que me ha hecho Sasuke, aprieto los dientes y los ojos no dejan de echar lágrimas. Cojo mi ropa como puedo, al moverme noto el dolor mas profundo dentro de mi ser al que me haya sometido, la mayoría está rota y manchada, me la pongo lo mejor posible y salgo de allí. Necesito volver a casa y ducharme, dejar de sentir el olor y los fluidos de Sasuke por todo mi cuerpo, aunque de mi alma es imposible lograr que desaparezca.

Corro sin parar de llorar, necesito llegar a mi casa, sentirme a salvo y limpia. Me meto en la ducha cuando llego y me enjabono con la esponja apretando contra mi piel castigada. Los bocados y arañazos no se pueden borrar, al igual que la humillación que me ha amargado la vida. Me tiro un rato sentada ahí, bajo el agua caliente de la ducha me acurruco e intento que mis penas se vayan por el desague.